El 12 de octubre recién pasado se despachó por amplia mayoría de la Cámara de Diputados el último trámite del proyecto de ley que busca regular el ecosistema digital de las Fintech. El texto establece un nuevo paradigma que permitirá poner a Chile dentro de los estándares más avanzados a nivel mundial para normar las compañías tecnológicas financieras y, además, fomentará la participación de pequeños inversionistas, la competencia, una mayor innovación y la anhelada inclusión financiera, que permitirá a diversos y nuevos actores involucrarse en esta materia.
Aunque todavía queda tiempo para que la ley entre en plena vigencia, el panorama es alentador para la industria. El ministro de Hacienda, Mario Marcel, precisó que el proyecto incorporó los nuevos estándares de tratamiento de datos personales, bajo la premisa de que las personas son los titulares de dicha información. Además, la Comisión para el Mercado Financiero (CMF) será el ente encargado de salvaguardar que la información no incluya información sensible.
“Quisiera destacar que es un proyecto que no busca favorecer a un sector en particular, busca promover la competencia y permitir que instituciones que son distintas a nuestra banca tradicional o retail financiero tradicional pueda competir por la prestación de servicios financieros más baratos al público, es un proyecto pro competencia”, agregó el jefe de Hacienda en el pleno de la Cámara.
La iniciativa entró a discusión parlamentaria hace más de un año y además de establecer un marco regulatorio para las fintech, propiciará un sistema de finanzas abiertas también llamado “open banking”. Dentro de los beneficios de la misma los especialistas destacan menores precios, mejores servicios -más customizados-, mayor cautela en el uso y protección de datos de los usuarios y aumento de las garantías operativas de los diferentes entes financieros. Será la CMF (Comisión de Mercados Financieros) la encargada de poner las reglas y exigencias para garantizar el cumplimiento de esta ley mediante un registro oficial de prestadores financieros. Asimismo, dicha institución deberá incorporar nuevas nomenclaturas en su quehacer tales como “crowdfunding” (modalidad de financiamiento colectivo) y el ya mencionado “open banking”, terminología clásica en países tales como Colombia, México y Brasil donde este tipo de regulación ya es una realidad hace tiempo.
Descarga aquí el texto final de la ley Fintech.